el infierno azul cap 3

Mejor le pongo así el infierno azul, por que puede haber muchos infiernos ¿no? de drogas, de culpa, de odio, de rencor.

capitulo 1
capitulo 2

En fin continuamos:

Pasaron pocos días y todos sus amigos, que eran ahora desconocidos hablaban de una sola cosa: Martin, su mejor amigo (según ellos) nunca lo había ido a ver desde el accidente, y todos especulaban el por que de ello, pero para Kyle la única preocupación era el desconocido que había entrado la otra noche, poco o nada le importaba un amigo que no recordaba.

Mientras la Dra. Bardem habla con los padres del Kyle:
-Es extraño, sus lesiones cerebrales ya sanaron y aquellas zonas donde el daño fue mayor se han restaurado incluso recuperó las funciones de las áreas cerebrales dañadas.
-Claro, si mi hijo es bien fuerte y bien sano.-dijo alegre el padre.
-Pero... siendo tan buena su recuperación de las zonas dañadas es muy extraño que tenga amnesia pues los daños no justifican un efecto como ese, les diré algo que espero no tomen como algo descabellado: creo que lo suyo es psicológico, es decir no es que su cerebro este dañado sino que ha bloqueado esos recuerdos y no sé por qué, si gustan les puedo recomendar médicos muy capaces...

-¿Psicólogos? preguntó la madre.

-¡NO! esos no son doctores, son licenciados, los médicos que se especializan en la psique son los psiquiátras, un psicólogo nunca podrá medicar ni establecer diagnósticos neuronales, aunque su hijo ya esta recuperado y le tengo que dar de alta me preocupa su condición y quisiera hacerle estudios.

-¿Pero esta sano no?, preguntó el padre.

-Si, pero su amnesia lo puede inhabilitar en muchas cosas.

-Pero si ya esta bien ¿nos lo podemos llevar?.

-Yo...si, claro que se lo pueden llevar, pero necesito que regresen y atiendan esto.

-Claro claro, lo que diga. ¡Vamonos!

La doctora se quedó con la sensación que esa era la última vez que vería a esa familia a menos que hiciera algo. Y tenía razón. Kyle solo escucho a su padre decir que lo único que querían era sacarles dinero que no tenía sentido, que poco a poco y con apoyo de la familia recordaría todo.

Esa misma noche ya estaba en su cuarto conociendolo de nevo, era el cuarto de un chico común y corriente: posters de los grupos del momento, una computadora eMac, varios cajones llenos de cosas triviales, y la sorpresa: un diario, poco duró el gusto, el diario estaba arrancado de todas las hojas escritas, sólo una frase pudo ver en él: "No puedo".

Pero la sorpresa mayor vino cuando descubrió un cajón oculto en su taburete, con muchas bolsas como de té, pero más pequeñas llenas de un polvo azul y a un lado una pistola con municiones cerca. Además una carta con un contenido que sólo lo confundía más:

"Si es cierto lo que dicen, si es cierto que no eres el hombre que eras, que ahora tienes un nuevo inicio te veré en el deportivo a media noche"

continuará...